
El rey de las adaptaciones y de los sentimientos parece el director idóneo para llevar al cine el libro Tan Fuerte Tan Cerca,donde bajo la mirada de un niño hiperactivo y algo excéntrico viajamos por el sufrimiento que produjo dicho acontecimiento en la vida de muchas personas.
Oskar,el niño protagonista,acostumbrado a que su padre le preparara pequeñas aventuras por Nueva York,se siente desamparado tras la muerte de su padre(Tom Hanks) el 11-S,hasta que encuentra un llave que cree que su padre le dejó para encontrar algo que le vuelva a acercarse a su padre,a la vez que se va distanciando de su madre(Sandra Bullock).Por este recorrido se encontrará con diversos personajes,muy variopintos,a la vez que un extraño inquilino mudo le ayudará en su búsqueda.
Stephen Daldry,el rey de la sensiblería tras obras como la muy perfecta Las Horas y las notables Billy Elliot y El Lector,nos ofrece una dura película que básicamente habla sobre el dolor y la pérdida y sobre todo las consecuencias.Bajo la mirada de un niño excéntrico,maniático,histérico y chillón,que ya se muestra así antes de la tragedia,conocemos a muchas personas en la aventura que empendre el niño.Un viaje que supuestamente debería liberar al protagonista,pero que se nos muestra cómo sufre cada vez más y más.
Película bien intencionada,que no ha sido del gusto de muchos críticos,atacando su excesiva pretensión de hacer llorar al espectador,pero de qué otra forma se puede uno aproximar a un hecho tan trágico,si fuera de otra forma se le atacaría de excesiva frialdad o irrespetuosidad. Observamos todo lo contrario en esta película,no busca culpables,no suelta ningún tipo de ataque político ni ideología,no nos habla de que si los musulmanes son buenos excepto los fanáticos...estos temas muy típicos ya los han tratado otras películas;aquí nos habla de cómo sobrevive una familia a la pérdida de un ser querido,y bien podría haberse situado la trama en otro contexto y hubiera funcionado igualmente.

A pesar de éstos pequeños detalles,Daldry ha construido un sólido melodrama donde ha conseguido momentos de puro dramatismo,donde el niño explota y explora su dolor,a diferencia de cuando intenta esconderlo y suelta toda su verborrea.
Hay en la película tres momentos memorables que precisamente son aquellos en los que el protagonista ahonda en su dolor y en lo que hizo durante el trágico día,cuando escucha los mensajes de voz con Max von Sydow,cuando le cuenta su doloroso secreto a Jeffrey Wright y el duro cara a cara con la ausente madre.
Quizás lo que haya dolido a los críticos es que debido al buen hacer del director en otras películas,era que esperaban la gran película sobre el 11-S,esa película que tememos que nunca llegará,pero mientras tanto se puede disfrutar(?) de esta aproximación de dolor,pérdida,rabia y lucha.
+La escena de los mensajes con Max von Sydow
-Su histérico protagonista
PUNTUACIÓN TOTAL: * * *
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